Llegado el fin de semana es momento para descansar, para descansar el cuerpo, sobre todo las piernas, y también para descansar la mente. Esta semana me tocó ir de viaje por temas de trabajo,estuve fuera el jueves y el viernes hasta casi las siete de la tarde (a alguno de la cuadrilla también le tocó hacer kilometros por idéntico tema) pero cuando llegué el viernes, no me lo pensé dos veces, cogí la bolsa del gym y a las 8:25 estaba en la sala de spinning como un clavo, calentando los motores para los siguientes 45 minutos. A pesar de que la semana ha sido larga, aún quedan fuerzas de flaqueza para irte al gimnasio y echar un magnífico rato pedalenado con gente tela de enrollada. Eso es lo que tiene de "cojonudo" el spinning, es un exfoliante macanudo, te deja limpio por fuera pero hace el mismo efecto por dentro. Si el remate final es una cervecita bien fría, ya sea en tu casa o con los amigos, entonces ¿qué se puede decir?
22 de septiembre de 2007 19:55
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3 comentarios:
que......que se puede decir? pues que ha merecido la pena el esfuerzo de ir aun gim un viernes despues de un buen numero de horas currando !!
con un par !!!
queridos mios, lo mejor no es la ultima subida a 80 rpm, ni mucho menos, lo mejor es ... el tubo de cerveza fria en la sala de descanso del guerrero !!
toi contigo piensa en mi !!
Eres mi ídolo, Boss. Como tú, ninguno. El subidón de la última subida, valga la redundancia, a 80 rpm es la ostia. La adrenalina, las endorfinas, las anfetaminas y la aspirina se sudan por los poros de la piel, y eso es como un colocón. La cerveza sirve para templar al final y hacer que el cuerpo retome su ritmo habitual.
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