Jorge dijo

Pensadlo bien, queridos spinners. Deteneos a pensar un poquito. ¿Por qué estamos aquí? ¿Por qué aguantamos horas y horas de sufrimiento montados en una bicicleta que no se mueve, dejándonos literalmente el culo en ella? ¿Por qué? La respuesta es sencilla. Unos pueden pensar que pedaleando incesantemente se rebajan esos kilillos de más adquiridos durante las interminables horas de chiringuito playero. Otros podrán pensar que dando pedales pueden enterrar a su conciencia cuando al terminar las clases se ponen hasta las patas dejando el frigorífico temblando. Todo eso es mentira, pura falacia. La respuesta es otra. Este deporte, cuando se realiza con regularidad, funciona como una droga para el cuerpo. La droga del bienestar. Y como cualquier droga, es necesario hacer uso de ella de una forma regular. Bendito “spinning”.Lo cierto es que cualquiera puede “spinnear”, lo único que hace falta es tener un poco de paciencia y no desfallecer en el intento. No hay que preocuparse si en las primeras clases la cosa no funciona como uno quisiera. No hay que intentar parecerse a los de la primera fila o al monitor. Lo que si es cierto es que hace falta una buena dosis de disciplina personal para poco a poco ir superándose. Pasito a pasito se consigue, vaya que si se consigue. Solo hay que ver a los “fieras” que se colocan en primera fila, secundando al “Boss”. Pero, cuidado, que de esta peña, el que menos tiempo lleva pedaleando lleva casi dos años.Por cierto, propongo que en este blog, poco a poco vayamos añadiendo palabras que formen parte del argot “spinner”. Valgan como ejemplo: pedaleo redondo, pedalier, zapatillas automáticas, calas, etc.Un saludo y hasta la próxima.
10 de septiembre de 2007 23:05